- Lucía
- Paraná, Entre Ríos, Argentina
- Yo creo que nos guiamos por la gente. Quizá para no parecer raros a los ojos de los demás, quizá para ser supuestas personas normales como ellos, o quizá porque tememos ser vistos de una manera diferente, creemos que lo mejor es seguir los pasos de todos. No contradecimos , muchas veces no opinamos. Queremos ser diferentes siendo iguales a todos. Queremos destacarnos y sin embargo primero siempre observamos que pasos dió la otra persona. Tenemos puntos de vistas diferentes, y tantas veces no nos animamos a decirlos, y callamos... callamos mucho. Sin embargo existe la gente capaz de expresar lo que siente sin temor al comentario del otro, gente que es vista como alguien raro y ellos lo saben perfectamente, pero no temen serlo, no temen ser diferentes. Pues esa gente sabe que ellos no son los raros, esa gente sabe que los raros son aquellos que tratan de copiarse entre sí, temerosos de mostrarse como son e incapaces de ser ellos mismos. Tienen la certeza de ser capaces de mostrarse al mundo y aun mejor, a las personas, como realmente son. Raros terminan siendo los que se sienten normales.
viernes, 16 de octubre de 2009
Interrumpiste mis sueños, y me dijiste indirectamente que yo no era para vos ni tú para mí. En mi cabeza te dí la razón, y dije a mí misma "es hora de cambiar". Sin embargo es difícil, y lo que menos quiero es tiempo. Impaciente espero el día en que todo vuelva a la normalidad en mí, de que seas alguien más en mi vida. La voluntad es nula, las ilusiones no cesan, todo sigue y sigue y el tiempo que desprecio pasa rápidamente. Quisiera poder decirme basta, pero no sirve de nada. Estoy desepcionada, por más que no fuera la correcto me gustaría volver a ser como antes, cuando nada me importaba y el amor para mí no existía...