Me gusta compararte con cosas materiales. Hoy me parece que sos como un boomerang. Es como que siempre te tengo en mis manos, agarro todas mis fuerzas y te tiro, lejos, bien lejos de mí. Pero es inevitable, siempre volvés exactamente al lugar en donde te tiraron. Pasás de estar bien lejos a estar rozándome la piel. Cuando ya creo que no podés estar más lejos, me voy cuenta que ya fuiste y volviste y estás nuevamente al lado mío. Qué rápido sos, nadie te puede seguir la corriente. Quiero alejarme de vos, de todo eso que me hizo mal, pero parece que estoy atada a tu tobillo. Pensé que en todas las vacaciones no te iba a ver, pero ¡oh dios! acá estás. Que bronca, no me hagás quererte nuevamente, esta vez opté por odiarte... total para vos es lo mismo. Por favor, si me vas a hacer mal, ¡alejate de mí! Por favor te lo pido.
Texto dedicado a Emanuel que dice que no me puse las pilas con el cortito texto anterior jaja.