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Paraná, Entre Ríos, Argentina
Yo creo que nos guiamos por la gente. Quizá para no parecer raros a los ojos de los demás, quizá para ser supuestas personas normales como ellos, o quizá porque tememos ser vistos de una manera diferente, creemos que lo mejor es seguir los pasos de todos. No contradecimos , muchas veces no opinamos. Queremos ser diferentes siendo iguales a todos. Queremos destacarnos y sin embargo primero siempre observamos que pasos dió la otra persona. Tenemos puntos de vistas diferentes, y tantas veces no nos animamos a decirlos, y callamos... callamos mucho. Sin embargo existe la gente capaz de expresar lo que siente sin temor al comentario del otro, gente que es vista como alguien raro y ellos lo saben perfectamente, pero no temen serlo, no temen ser diferentes. Pues esa gente sabe que ellos no son los raros, esa gente sabe que los raros son aquellos que tratan de copiarse entre sí, temerosos de mostrarse como son e incapaces de ser ellos mismos. Tienen la certeza de ser capaces de mostrarse al mundo y aun mejor, a las personas, como realmente son. Raros terminan siendo los que se sienten normales.

lunes, 11 de enero de 2010

Es cuestión de tiempo. Entre desear algo y conseguirlo hay una cuestión de tiempo. El problema es que ese tiempo entre lo que deseamos y su realizacion puede ser eterno. Cuando queremos algo lo queremos ya... por algo lo queremos ¿no? La ansiedad, esa obsesión porqe el futuro sea hoy, ese capricho del deseo inminente, ese fast food dificil de digerir. Yo sé que las cosas que importan de verdad necesitan tiempo. Sé que no hay que apurarse, pero cuando quiero algo necesito señales claras de que eso va a llegar, sino me desespero. La incertidumbre me mata, me vuelvo inseguro, me hace dudar de que eso que quiero tal vez nunca llegue. Tal vez por eso necesite alguna prueba de alguna certeza que calme esta ansiedad. La tarde es larga pero es tan corta la vida y uno quiere todo ya. Tal vez por esa ansiedad uno termina perdiendo justamente eso que tanto quiere. Las cosas que de verdad importan llevan tiempo, las cosas que valen cuesta trabajo. Por esa obsesión de que las cosas sean hoy, ya, como uno quiere, te podes perder y no ver lo que en verdad ya existe.