Sé que si no lo hago ahora algún día va a ser tarde, y no es que piense que todo se termina ahora, porque algo me dice que no va a ser así. Siento que quiero ayudarte pero no sé como, a veces las cosas se resuelven por sí solas dicen... Cuando me pongo a pensar, me doy cuenta que soy una gran egocéntrica que a veces privilegia cosas menos importantes sobre otras que después va a valorar. Me refiero, perdí mucho tiempo con vos, lo sé. Pero... ¿quién dice que el tiempo perdido no se recupera? Quiero creer que todavía estoy a tiempo. Porque uno no sabe lo que tiene hasta que lo pierde, y yo a vos no te quiero perder nunca ¿sabés?. Desde chica siempre quise que todas las personas que me rodean sean inmortales ¿te imaginás lo que sería eso? Todos alguna vez soñamos con la vida eterna, pero lamentablemente llega un momento en el que Dios decide que nuestra vida en la tierra terminó y nos lleva a la otra vida. Algunos dicen que allá arriba se la pasa mucho mejor que acá... quien sabe, pero tarde o temprano todos lo experimentaremos.
No es que quiera que te mueras, sino que estoy tratando de valorar realmente a las personas que tengo evitando imaginarme que será de mí sin ellas... Es triste esto, pero hay que saber sobrellevarlo me parece. Creo que no hay que amar ni odiar la vida que nos tocó, sino intentar vivirla de la mejor manera. Simplemente quiero que sepas, que a pesar de tus problemas, tus enfermedades y todo, a pesar de que muchas veces yo me haya burlado de tu falta de memoria y de tus confusiones, a pesar de que no te acuerdes la fecha de mi cumpleaños ni mi edad -pero sé que no lo hacés apropósito-, a pesar de todo... sos indispensable en mi vida. Pensá el papel fundamental de un abuelo en la vida de su nieta, ¡es muy importante e irremplazable! No me alcanzan las palabras para agradecerte todo lo que has hecho por mí, te quiero con todo mi corazón. Y jamás en la vida me permitiría olvidarte, sos vital. Tanto a mí como a vos nos queda una vida por delante y quiero que ambos podamos seguir disfrutándola lo más cómodamente posible.
Quiero, mejor dicho, necesito verte bien. Sé que dentro tuyo tenés fuerzas para poder estar bien a pesar de tus ataques de nervios. Yo sé que vos podés salir de esta, al igual que siempre lo hiciste! Es un orgullo tenerte como abuelo.
¡QUE TE MEJORES!
Tu nieta, Lucía.
