Viví cada día como si fuera el último, aprovechá al máximo cada hora, cada día y cada época de la vida.... así podrás mirar al futuro con confianza y al pasado sin tristeza. Sé vos mismo. Tené valor para ser diferente y seguir tu propia estrella y no tengas miedo de ser feliz. Amá con toda el alma y el corazón. Creé en aquellas personas que amás verdaderamente. Olvidate de lo que hayas hecho por tus amigos y recuerda, lo que ellos han hecho por vos. No reparés en lo que el mundo te debe y fijate en lo que le debés al mundo.
- Lucía
- Paraná, Entre Ríos, Argentina
- Yo creo que nos guiamos por la gente. Quizá para no parecer raros a los ojos de los demás, quizá para ser supuestas personas normales como ellos, o quizá porque tememos ser vistos de una manera diferente, creemos que lo mejor es seguir los pasos de todos. No contradecimos , muchas veces no opinamos. Queremos ser diferentes siendo iguales a todos. Queremos destacarnos y sin embargo primero siempre observamos que pasos dió la otra persona. Tenemos puntos de vistas diferentes, y tantas veces no nos animamos a decirlos, y callamos... callamos mucho. Sin embargo existe la gente capaz de expresar lo que siente sin temor al comentario del otro, gente que es vista como alguien raro y ellos lo saben perfectamente, pero no temen serlo, no temen ser diferentes. Pues esa gente sabe que ellos no son los raros, esa gente sabe que los raros son aquellos que tratan de copiarse entre sí, temerosos de mostrarse como son e incapaces de ser ellos mismos. Tienen la certeza de ser capaces de mostrarse al mundo y aun mejor, a las personas, como realmente son. Raros terminan siendo los que se sienten normales.