La vida es como un ring de boxeo, si no te defendés te cagan a piñas. La vida es como un jamón, o te lo comes vos o se lo come otro. La vida es como un camaleón, cambia de colores todo el tiempo. La vida es como el mar, se ve el principio pero no se ve el fin. La vida es como una calesita, te tiene a las vueltas. La vida es como la mayonesa, cuesta mucho y hay que tratar de aprovecharla lo más posible. La vida es como el sol, a veces se esconde pero nunca desaparece. La vida es como una planta, si no la cuidas la perdés muy rápido. La vida es como el fútbol, a veces ganás, a veces perdés. La vida es como una montaña rusa, tiene subidas, bajadas, curvas agudas y momentos de descanso. La vida es como los tacos, se ven hermosos y son muy incómodos. La vida es como una canilla, cuando menos te lo esperás te cae un chorro de agua fría.
- Lucía
- Paraná, Entre Ríos, Argentina
- Yo creo que nos guiamos por la gente. Quizá para no parecer raros a los ojos de los demás, quizá para ser supuestas personas normales como ellos, o quizá porque tememos ser vistos de una manera diferente, creemos que lo mejor es seguir los pasos de todos. No contradecimos , muchas veces no opinamos. Queremos ser diferentes siendo iguales a todos. Queremos destacarnos y sin embargo primero siempre observamos que pasos dió la otra persona. Tenemos puntos de vistas diferentes, y tantas veces no nos animamos a decirlos, y callamos... callamos mucho. Sin embargo existe la gente capaz de expresar lo que siente sin temor al comentario del otro, gente que es vista como alguien raro y ellos lo saben perfectamente, pero no temen serlo, no temen ser diferentes. Pues esa gente sabe que ellos no son los raros, esa gente sabe que los raros son aquellos que tratan de copiarse entre sí, temerosos de mostrarse como son e incapaces de ser ellos mismos. Tienen la certeza de ser capaces de mostrarse al mundo y aun mejor, a las personas, como realmente son. Raros terminan siendo los que se sienten normales.