
Mi alma herida, se consume en silencio todos aquellos momentos vividos y perdidos ahora. La rabia brota, me ahoga, me impulsa hacia el océano de odio en que se ha convertido mi pasado cuantas mentiras surgían de tus labios, y yo no veía. Mis ojos ciegos fingían verte mirarme cuando tu mirada se alejaba de mi el calor de mi cama se esfumó como muere un rescoldo en las cenizas, los abrazos entregados, besos compartidos, se quedo en aire. El aire se volvió frío a mí alrededor y los rayos del sol no bastaban para calentar mi alma. Las mentiras se convertían en crueles verdades que se repetían incansables en mis oídos. Dulces palabras escondiendo amargas perlas de cobardía, entierralas en lo mas profundo del olvido, simples palabras que encierran venenosos intentos de hacerte sufrir y que puedo hacer si la persona que me hace llorar es la unica capaz de consolarme y calmar este dolor..